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Como funcionan los imanes en los motores?

¿Cómo funcionan los imanes en los motores?

En un motor eléctrico la interacción se produce entre un electroimán y un imán fijo que lo rodea. La fuerza de atracción y repulsión de los polos de los dos imanes provoca que el electroimán comience a girar con el fin de alinear los polos opuestos en el campo magnético.

¿Cómo se llama el imán móvil en los motores?

Esta parte móvil, el eje con las espiras, es lo que se llama el Rotor del motor. Estas espiras se llaman bobinado del motor, tiene un principio, en la primera espira, y un final en la última espira.

¿Cómo se construye un motor de imanes permanentes?

Básicamente estos motores están constituidos normalmente por un rotor sobre el que van aplicados distintos imanes permanentes y por un cierto número de bobinas excitadoras bobinadas en su estator. Las bobinas son parte del estator y el rotor es un imán permanente.

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¿Qué son los motores de imán permanente?

Los motores de imán permanente son extensivamente usadas en servomotores, accionamientos eléctricos para posicionamiento, robótica, máquinas herramienta, ascensores, etc. Se han llegado a construir máquinas de una potencia por encima de 1 MW por ejemplo para el accionamiento de submarinos.

¿Qué es un imán permanente?

Un imán permanente se define como un material que puede ser imantado y que es capaz de generar un campo magnético persistente, a diferencia de los imanes temporales que generan un campo magnético sólo mientras está activa la fuerza o energía externa que lo genera.

¿Cuál es la diferencia entre un imán permanente y un electroimán?

La remanencia que necesita un imán permanente debe ser alta, de forma relativa y la consiguen con buen coste. Un electroimán, contrario a un imán permanente, necesita que la corriente eléctrica pase mediante él.

¿Qué es el campo magnético de un imán permanente?

Este campo magnético de un imán permanente es dirigido velozmente a través de las líneas de campo. Los imanes permanentes poseen 2 polos que las personas pudieran definirlos como A y B. Los polos comunes tienden a repelerse, mientras que los que son opuestos su tendencia es a atraerse.