Como se dictan las ordenanzas municipales?

¿Cómo se dictan las ordenanzas municipales?

Las ordenanzas son una clase de resoluciones que dicta el alcalde con acuerdo del Concejo Municipal, y se caracterizan por ser normas generales y obligatorias aplicables a la comunidad, dentro del territorio de la comuna.

¿Cuál es el papel de las ordenanzas locales dentro del ordenamiento jurídico español?

Las Ordenanzas son disposiciones administrativas de carácter general y de rango inferior a la ley elaboradas por los entes locales que, en la esfera de su competencia, los Ayuntamientos pueden aprobar. Ni las Ordenanzas, ni los Reglamentos locales, contendrán preceptos opuestos a las leyes o disposiciones generales.

¿Cómo se aproban las ordenanzas locales?

El procedimiento para la aprobación de las ordenanzas locales ha de ajustarse a los siguientes trámites ( artículo 49 de la Ley 7/1985, de 2 de abril ): a) Aprobación inicial por el pleno. b) Información pública y audiencia de los interesados por un plazo mínimo de treinta días para la presentación de reclamaciones y sugerencias.

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¿Qué son las ordenanzas municipales?

Ordenanzas municipales. Las ordenanzas son disposiciones administrativas de carácter general y de rango inferior a la ley aprobadas por los entes locales en el ámbito de sus competencias y en ejercicio de la potestad reglamentaria que tienen atribuida. También reciben el nombre de Reglamentos.

¿Cuáles son los diferentes tipos de ordenanzas y reglamentos locales?

Existen distintos tipos de ordenanzas o reglamentos locales según su objeto de regulación: • reglamento orgánico, ordenanzas fiscales, urbanísticas y de policía. Ordenanzas y Reglamentos locales se diferencian claramente de los actos administrativos en que estos constituyen algo ordenado en aplicación de una disposición general.

¿Por qué es importante elaborar y aprobar ordenanzas municipales?

En definitiva, lo que se pretende con este proceso para elaborar y aprobar ordenanzas municipales es una mejor planificación de la actividad legislativa, una mayor participación de los ciudadanos en los procesos que les incumben y la evaluación de las iniciativas puestas en marcha.